Filosofía del Bitcoin y las criptomonedas

El objeto de esta lección es esbozar una filosofía crítica del Bitcoin y las criptomonedas desde las coordenadas del materialismo filosófico de Gustavo Bueno. Nos centraremos, como es lógico, en el Bitcoin, ya que este criptoactivo se ha despegado poderosamente del resto de las llamadas criptomonedas (Ethereum, XRP / Ripple, Tether, Solana…).

Desde el materialismo filosófico, Bitcoin se nos presenta como una institución que tiene un momento tecnológico y un momento nematológico. Analizaremos, primeramente, el momento tecnológico del invento dado a conocer por el misterioso Satoshi Nakamoto en 2008, insistiendo en que Bitcoin no se reduce a la Blockchain o cadena de bloques, pues la diferencia específica radica en el carácter autogórico de Bitcoin: el propio registro conforma y constituye la moneda. Además, Bitcoin involucra tanto un protocolo y una unidad de cuenta como una red distribuida de nodos, mineros y usuarios que precisa de ordenadores, equipos de minado, billeteras, energía eléctrica, conexión a Internet… Al igual que la Inteligencia Artificial, Bitcoin tiende a pensarse descorporeizado, olvidando toda la infraestructura material que necesita.

A continuación, estudiaremos el momento nematológico, analizando las ideas-fuerza que operan detrás de esta tecnología. Entre las ideas propias de la filosofía espontánea de los bitcoiners (maxis o maximalistas) destaca la que refleja el cartel de la lección: Bitcoin es la única criptomoneda con valor y terminará por comerse al euro y al dólar, convirtiéndose en la moneda global del futuro. Algunos bitcoiners en la órbita cypherpunk incluso especulan con que Bitcoin provocará la caída de los Estados en cuanto forma política agotada, dejando paso a nuevas formas de organización social (las ciudadelas o micrópolis).

Cabe decir que la filosofía emanada por Bitcoin está, en general, presa de presupuestos filosóficos liberales próximos a la escuela austríaca de economía, de sus doctrinas sobre la libertad individual, la propiedad privada, el mercado y el Estado. Clasificaremos estas premisas implícitas de acuerdo con las teorías sobre la economía y la política del materialismo filosófico; pero también matizaremos la descentralización (con respecto al desarrollo del protocolo, el minado o la custodia), el anonimato y la inconfiscabilidad que suele atribuirse –sin precaución alguna– a Bitcoin. En especial, criticaremos la posibilidad de la propiedad y de la moneda al margen del Estado, recurriendo para ello a las teorías pluralistas –no reduccionistas– del Estado y de la moneda del materialismo filosófico.

Pese a su auge, Bitcoin no es, de momento, una moneda. Bitcoin funciona, a pesar de su alta volatilidad, como reserva de valor (“oro digital”), pero no funciona como medio de intercambio ni como unidad de cuenta ampliamente aceptados. Es más, de igual modo que no existe una moneda global, como no existe una lengua universal o un único Estado, sino una pluralidad de lenguas, monedas y Estados, hay que incidir –aunque esto ofenda a los piadosos oídos maxis– que, en puridad, también existe una pluralidad de bitcoins, como consecuencia de las bifurcaciones duras que se han producido a lo largo de sus agitados 17 años de vida (Bitcoin Cash, Bitcoin Gold…), dicho esto sin perjuicio de reconocer que el primer analogado sigue siendo, desde luego, Bitcoin Core o Bitcoin “a secas”.

Finalmente, abordaremos la geopolítica del Bitcoin, atendiendo al papel de ciertos Estados –principalmente EE.UU. y China– como superballenas que cuentan con reservas estratégicas de bitcoins. Estados que, por otra parte, protegen a sus ciudadanos bitcoiners de enemigos externos e internos mediante el ejército y la seguridad jurídica, así como posibilitan su acceso a la red eléctrica, Internet o, simplemente, a los codiciados chips que requiere el funcionamiento de este activo digital.

La labor del filósofo es, en suma, distinguir, no confundir.

Carlos M. Madrid Casado (1980). Investigador asociado de la Fundación Gustavo Bueno. Licenciado en Matemáticas y Doctor en Filosofía por la Universidad Complutense de Madrid, donde ha ejercido de profesor de Estadística. Ha ofrecido en la Escuela de Filosofía de Oviedo estas lecciones: “La ciencia y el relativismo. Filosofía vs Sociología de la ciencia” (31,1/ene-feb/12), “¿Qué es la filosofía de las matemáticas? La teoría del cierre categorial aplicada a las matemáticas” (5/mar/18), “España y la Revolución Científica” (11/mar/19), “¿Qué es la filosofía de la Física? La teoría del cierre categorial aplicada a la Física” (9/mar/20), “El Materialismo emergentista de Mario Bunge desde el Materialismo filosófico. Gnoseología, Ontología y Política” (10/may/21), “Filosofía de la Ciencia del Cambio Climático” (14/mar/22), “Filosofía de la Inteligencia Artificial” (13/mar/23) y “¿Qué es la Filosofía de la Inteligencia Artificial?” (11/mar/24).

 
Escuela de Filosofía de Oviedo