Respuestas
El punto de partida o la base de la filosofía materialista
Gustavo Bueno responde a unas cuestiones planteadas desde Chile por el sacerdote René Benavides Rives.
Gustavo Bueno, El punto de partida o la base de la filosofía materialista
Respuestas nº 16 (3 de diciembre de 2013, 25 m)
De: René Benavides Rives
Enviado el: miércoles, 6 de noviembre de 2013 5:23
Asunto: Sobre la esencia del materialismo filosófico
Estimados:
Soy un sacerdote chileno y descubrí esta página –aunque don Gustavo se fastidie– después de orar mucho pidiendo al Señor que me indicara una fuente en donde buscar algo sobre filosofía realista. Y me lo encontré.
Realmente ha sido un incentivo para mí –que además estudié psicología– el tener que volver al “Viejo Pagano” (Aristóteles) y sobre todo a comenzar sistemáticamente a leer y estudiar a Santo Tomás de Aquino de nuevo y desde el principio, así como en eso me vaya la vida.
Además, he recomendado la página vuestra a todos mis contactos, mis feligreses y amigos en general.
Demás está decirles que he visto las conferencias de don Gustavo y junto con aprender me he reído como nunca, literalmente a mandíbula batiente.
Tenemos un grupo de oración donde nos reunimos semanalmente un grupo de profesionales (médicos, filósofos, psiquiatras, arquitectos y un largo etc.) y por cierto junto con orar estudiamos algunos de los temas propuestos por don Gustavo. […]
Pero, quisiera hacerles algunas preguntas:
1º Me cuesta encontrar el punto de partida o la base de la filosofía materialista. ¿El sustancialismo o qué?
2º Y el derecho natural y el principio de la ley natural. ¿De dónde saco el fundamento de la dignidad humana? ¿Del evolucionismo? ¿De lo funcional? ¿Qué argumento uso para decir que no existe la ley natural? No basta decir que no existe. ¿O tengo que usar los argumentos de la Bibiana Aido?
3º ¿Por qué esa tirria en contra de la metafísica como sinónimo de irreal? Un pensamiento es inasible, no se agarra, no se ve en un microscopio, pero “es”.
4º En son de broma y para que se rían un poco: díganle de parte mía a don Gustavo que vaya pensando en la posibilidad, siquiera en la remota posibilidad, de encontrarse con el Dios en quién no cree. Por último por conveniencia. Porque, siendo un hombre de buena voluntad, no se permite la ignorancia culpable. Y es posible que su infierno sea 1º Estar eternamente en silencio. 2º Escuchando eternamente a Santiago Carrillo. 3º Escuchando eternamente a J. L. Rodríguez Zapatero. 4º Y por su fuera poco, sin tener que hablar ni con derecho a réplica, teniendo al juez Garzón como moderador de ese eterno debate y a la Bibiana Aido sirviendo los tragos a los contrarios.
Saludos y sean felices. No importa que no les importe, pero cuenten con mis oraciones.
René Benavides. Pbro.